Son rostros conocidos para el gran público que, con sus testimonios, han ayudado a dar visibilidad a una enfermedad que padecen unas 35 millones de personas en todo el mundo, cifra que, según fuentes médicas, se duplicará en 2013 y podría llegar a triplicarse en 2050. Como sucede con cualquier capítulo trascendental que nos afecta, no todos ellos viven o han vivido esta dolencia de la misma forma, por ello los casos que más han trascendido son los de aquellas personalidades que han hablado abiertamente sobre su alzheimer con la intención de eliminar parte del estigma que existe en torno a esta patología. Uno de los ejemplos más significativos es el de Pasqual M aragall quien, además de dar una rueda de prensa en 2007 para anunciar que tenía esta enfermedad, grabó tres años después el documental Bicicleta, cullera, poma para dar fe de su proceso vital y lucha contra la enfermedad. A Maragall, se le unen otros nombres como Ronald Reagan, Adolfo Suárez, Antonio Mercero,Carmen Sevilla, Eduardo Chillida o Charles Bronson, entre otros.
Maragall, uno de los históricos políticos del PSC y ex presidente de laGeneralitat de Catalunya, impactó al ciudadano con su confesión pública acerca del diagnóstico de la enfermedad del Alzheimer. Fue en rueda de prensa hace once años y, desde entonces, más allá de la presentación del documental sobre su particular lucha, apenas se ha dejado ver en actos públicos. Él y su familia han creado una fundación con su nombre para impulsar la investigación de enfermedades neurodegenerativas. “No es fácil, no es sencillo, pero esta visita me conduce a ser optimista, al menos a medio y largo plazo y lo haré personalmente y acompañado de sus posibilidades, económicas o personales o científicas”, aseguraba Maragall en la rueda de prensa de 2007 después de una dilatada carrera política en Catalunya, también como alcalde de Barcelona.
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